Se realizan tres edificios de las mismas características, para uso de laboratorios de investigación en el campus universitario de Badajoz. La idea es construir un módulo que se repita. Partir del módulo estructural de hormigón y repetirlo n veces en dirección este u oeste, incluso variando el número de plantas. De esta forma, se pueden construir edificios en varias fases y unirse por puentes o conexiones.

Son edificios modulados, de distribución clara y flexible, y se han proyectado de tal forma que ofrezcan la posibilidad de variar la compartimentación sin alterar la funcionalidad y la estética del propio edificio, según las necesidades de uso de los espacios vayan cambiando.

Tienen una marcada orientación norte-sur. Se construyen a partir de pórticos de hormigón armado distanciados 6 metros que conforman una fachada de “celdas” de hormigón visto y cerramiento con acabado de lamas de aluminio.

La distribución en planta se rige por la modulación de la estructura.

Pasillo orientado al sur o al norte, en función de la posición del edificio, y laboratorios, aulas y despachos orientados hacia la fachada opuesta. Conexiones con los otros edificios en el módulo ocupado por el núcleo de comunicación vertical.

Al este o al oeste, los edificios se cierran. Son fachadas cortas y opacas, lo que contribuye por un lado a la adecuación del edificio desde el punto de vista bioclimático y por otro, a la posible ampliación de los edificios a partir de la trama estructural ya planteada.